Día 26 – Genio Malvado

a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él” Génesis 4:7

Pecado – Una vez más reconozco mi deuda al esplendido trabajo del Rabino David Fohrman por éste análisis. Ésta palabra (teshukah), utilizada  en la Biblia tres veces, es realmente una palabra sobre la energía sorprendente de creación que reside en cada uno de nosotros. Es el anhelo más profundo que poseemos – el anhelo de hacer algo que perdure. Este es el análisis del rabino Fohrman. ¡Teshukah es parte de lo que somos! Sin él, dejaríamos de ser humanos.

Esto es desconcertante. ¿Por qué? Porque esta palabra se usa en la historia del asesinato de Caín. La mayoría de nosotros creemos que éste “deseo” es algo feo, algo malvado y elemental, y que debemos deshacernos de él.  Pero el hebreo no nos permite esa reacción. Teshukah está construido dentro de lo que significa ser mujer (vea Génesis 3:16), lo que significa amar profunda y apasionadamente (Cantares 7:10), y aquí, donde toma un matiz de algo letal que desea unirse a Caín. Nota la advertencia de Dios. “Debes enseñorearte de él.”  Eso no es lo mismo que “debes negarlo” o “Debes removerlo.” Esta fuerza vital profundamente arraigada dentro de nosotros debe ser domesticada, no borrada. Debe ser contenida para usarse como Dios manda. El peligro más grande de teshukah no es su presencia sino su insistencia de que la dejemos ser libre.

Caín no ha pecado; aún no. Sólo está consciente del poder rugiente dentro de él, un poder que ruega que le permita convertirse en su compañero de cama. Si, aquí existe una conexión muy intima. En las películas se llama “Durmiendo con el Enemigo,” pero eso aún no es completamente  correcto. Teshuka no es el enemigo. Soy yo, suelto de la mano del gobierno de Dios. Es la pasión sin el juicio, el deseo creativo sin la disciplina. Es precisamente a lo que Santiago llama el precursor al pecado. Es parte de cada hombre y mujer desde la Caída. Eva lo conoció. Ahora su hijo lo conoce. Y nosotros también, los engendros de su  teshukah.

Esto es terrible y maravilloso al mismo tiempo. Verás, cuando alineo mis necesidades más profundas de crear con las restricciones suaves de Dios, El y yo producimos algo fabuloso, algo que lo glorifica a Él y bendice a otros. En el proceso, experimento quien soy en verdad y me inundo de gozo (quién El es en verdad). Pero cuando permito que mi energía feroz me sirva a mí, cuando la utilizo para adquirir mi propio destino, entonces sucede algo desastroso. Creo algo sin Dios – y el resultado solo puede ser impuro. Dios advierte a Caín que tiene la amenaza de esa fuerza, una mucho más poderosa de lo que puede imaginar. Es la fuerza de actuar según su propia voluntad. Una vez suelta, ésta fuerza no regresará a su botella.

Dios no ordena a Caín que destruya la fuerza. Le dice a Caín que la controle. Que la lleve a alinearse con los propósitos de Dios y el uso de Dios. A fin de cuentas, ésta fuerza divina de creación le pertenece a Dios. Sólo la prestamos un momento mientras vivimos con Su aliento. Claro que como la utilizamos es una pregunta realmente escabrosa, porque puede convertirse el poder de matar. Tú y yo tenemos ésta misma teshukah. Si la usamos en sociedad con Dios, creamos vida. En sociedad con nosotros mismos, provocamos muerte. Estas son las únicas opciones. Aquí no hay opción de “no usar.” Así que, ¿qué haces con tu pasión más profunda?

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Ismael Gonzalez-Silva

Saludos y muy buenos dias a todos/as
Un breve comentario en lo que luego puedo proveer más información relacionada a la siguiente observación. Esta palabra que el Dr. Moen menciona y que el Rabino Fohrman comenta en su libro “The Beast That Crouches at the Door” tiene relación con el sexo. La fuerza a la que se alude es la del deseo sexual. Esta es la que Dios le dice a Caín que tiene que aprender a dominar. Voy a buscar en mi memoria porque existe un articulo donde se hace este analisis. Lo lei hace un par de años y tengo que buscarlo para poder ofrecer la referencia. Muchas gracias.

Ismael Gonzalez-Silva

Lo prometido es deuda asi que procedo a brindar la informacion que mencioné anteriormente. La declaración del Rabino Adin Steinsaltz aparece en la Revista Parabola (Summer 2007, p.80.) La voy a copiar tal y como esta en inglés. “The power, this desire, is a very strong one. There is a discussion of one verse in the Bible in the book of Genesis [4:7], that sin is “crouching at the door.” There is a question of how you translate “v’atah timshol bo”In most English translations, it is translated “… and thou shall overrule or rule it.”But most of the Jewish explanations and translations say it means “…and you are able to rule it.” The verse is about the word sex, both about temptation, and also about the ability to deal with it.”
De esta forma les proveo de la cita que les mencione. Pero esto no es lo unico. Si usted dispone de un texto en hebreo notara algo bien interesante. Esta palabra que se traduce como “enseñorearse” en Génesis 4:7 se utiliza de forma idéntica cuando Dios anuncia la sentencia sobre Eva: “…y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti.” (cf.Genesis 3:16). Será posible que el uso comun de esta palabra sea un indicador de que se trata del sexo, tal y como Steinsaltz menciona en su comentario??? Es mi opinión, que es asi. El issue en la sentencia de Eva tiene que ver con relaciones sexuales. Y el issue con el caso de Caín, de igual manera, tiene que ver con relaciones sexuales.
Muchas gracias por su atención.

Bessy Bendaña

Ismael,

En realidad no veo la relación al sexo en el versiculo en el hebreo, inglés o castellano. Sabemos que el pecado que nos acecha es una fuerte inclinación interna, pero eso variará en cada persona. No me cabe la menor duda que en algunos casos puede ser el sexo, pero hacer esa generalización tan absoluta dista de una interpretación exacta. Si es cierto que puede ser interpretado como “sexo,” no existe una indicación – rabínica o de otra índole – que siempre lo podemos interpretar así en toda la Escritura.

En el caso específico de Caín, no encuentro que el “deseo” de Caín, o el pecado en su puerta, contengan índole sexual. No indica “conocimiento” de ninguna naturaleza. Personalmente estoy de acuerdo con Skip, que indica el deseo de cada uno de hacer nuestra propia voluntad, y la dificultad que encontramos en doblegar esa voluntad a la del Señor. Sexual o de cualquier naturaleza. Así como el Señor dio responsabilidad a Caín sobre sus propias emociones y decisiones, asi la tenemos nosotros hoy. En todo ambito de nuestras emociones.

Y recordemos, que la fe es acción. Debemos hacer lo que Dios desea, no solo desearlo.