Hambre de Dependencia
12 de agosto Pero El respondiendo, dijo: Escrito está: “NO SOLO DE PAN VIVIRA EL HOMBRE, SINO DE TODA PALABRA QUE SALE DE LA BOCA DE DIOS.”
Mateo 4:4
Hambre de Dependencia
Solo – ¡Dios entrega! Pero no solo entrega pan. Por lo tanto, debemos ser cuidadosos de no insultar al Gran Proveedor al enfocar nuestra atención en lo que nos puede dar Su tierra. Si, la tierra es la bendición de provisión de Dios al Mundo. Si, debemos ser agradecidos de Su cuidado. Pero esta provisión solo es la precursora de algo mayor, algo que debe ser prioridad en la vida de todos los que reconocemos el don del pan. No es solo el pan lo que nos alimenta.
La palabra griega aquí es monos. Fácilmente reconocerás su afiliación con “singular,” “solo” y “único.” Yeshua recuerda al tentador que solo Dios es la única autoridad. Solo Dios es la fuente de verdad, instrucción, dirección y bondad. Claro que lo que Dios provee refleja Su carácter, pero no es un sustituto.
Pero Yeshua no hablaba griego. El cita Deuteronomio 8:3. La palabra hebrea en ese texto es bad. Esta palabra cambia significado dependiendo de cuales letras hebreas le han sido agregadas. En este caso, le aparece al inicio de la palabra y el significado se convierte “por si mismo” o “aparte de.” SI lees todo Deuteronomio 8:3, veras que la lección del pan asociada con la provisión del maná. Dios dio alimento en el desierto no solo como sustento físico sino para demostrar que Sus Palabras son el sustento de la vida misma.
Los resultados pueden parecer iguales, peor el pensamiento detrás del resultado no lo es. Dios da al Hombre el fruto de la tierra. El hombre come y vive. Si nos enfocamos en el producto final, nos encontramos absortos en lo que satisface el hambre hoy. Entonces es fácil olvidar al Dador entre los regalos. Cuando Yeshua satisface Su hambre, enfoca Su atención en el Dador, no en el don. Exhibe voluntad de esperar – de depender en el tiempo de Dios en vez de hacerse del don potencial para El mismo. Hace de Dios la prioridad, aun sobre Su propia necesidad. Como dice Goppelt, “El no apunta de la nutrición física a la espiritual, sino de lo que solo es de la tierra a aquello que viene de Dios.”[1] La diferencia es la fuente, no el resultado final.
No debemos vivir con una perspectiva de vida determinada solo por la producción. No debemos ser seducidos por la abundancia sobrecogedora del don. Ni debemos participar en la vida como si fuésemos dirigidos solo por los resultados. Debemos marcar el curso de nuestras vidas desde la fuente de nuestras vidas y seguir ese camino sin distracciones. La lección del pan la encontramos en el Dador. Sus palabras nos proveen todo lo que necesitamos puesto que son la razón por la cual necesitamos.
Pan, monos, bad, solo, únicamente, Mateo 4:4, Deuteronomio 8:3
[1] TDNT, Vol. 6, p. 19
