Ensalada de Frutas (1)
De todo árbol del huerto podrás comer, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás…. Génesis 2:17
Podrás Comer – “¿Qué hay de almuerzo?” “Ensalada de frutas.” “¡Excelente! Eso es lo único que comemos. ¡Ensalada de frutas, ensalada de frutas, ensalada de frutas! Te digo Eva, algunas veces me pregunto por qué nos puso Dios aquí. Es que no hay variedad.”
¿Cuál fue el mandamiento que recibió Adán sobre la comida? Piénsalo. ¿Acaso tiene sentido? ¿Por qué habría Dios de poner tanto énfasis en una actividad que es esencial para la vida misma? Adán tenía que comer. Eso es patentemente evidente. Y lo que come de éste árbol o de aquel en realidad no marca una gran diferencia, ¿no crees? Si le es permitido comer de cualquiera de los arboles excepto uno en particular, ¿Por qué hacer tanto alboroto por la comida? Eso es lo que sucede en este arreglo de palabras en particular. Verás, el texto dice achol tochel. Realmente es la palabra achal utilizada dos veces. Es como si Dios se repitiera para subrayar una idea. “Adán, no quiero que solo comas para vivir. Puedes tener festín con todo lo que hay aquí en el jardín. Deja que tu comer sea un consumo gozoso, una celebración de disfrute. ¡Ve por el!
¿Supones que Dios anima a Adán para que sea glotón? Lo dudo. ¿Entonces solo se trataba de ensalada de frutas? No lo creo. Necesitamos examinar el verbo hebreo achal para ver algo debajo de la superficie. Comencemos con el pictógrafo. Alef-Kaf-Lamed dibuja una imagen de “la fuerza que controla lo que es permitido.” En otras palabras, este verbo de consumo ya contiene el concepto de control. No es comer hasta que no puedo más. Es comer por disfrute y deleite. Esto no es noche de “come todo lo que quieras.” Este es un deleite gourmet. El acto de consumir reconoce nuestra responsabilidad de controlar lo que permite Dios. Podemos festejar por que El nos da permiso, pero aun somos responsables de cómo consumimos.
La imagen cambia algunas cosas. Primero, achal no es solo sobre comida. ¿Creíste que esta historia se trataba solo de manzanas, peras, duraznos y ciruelas? No, es sobre todo lo que da Dios en Su lugar de deleite. Recuerda, ´eden es el palacio del placer de Dios. El coloca ha´dam en el lugar dedicado a todo lo deleitable porque El desea que la criatura-terrenal (Adan) experimente la entrada a la vida (el pictógrafo de ´eden)- Así que la comida para el sustento es solo una pequeñísima pieza de todas las cosas deleitables que Dios nos ha dado. Comienza a pensar en Edén como un lugar de maravilla, gozo, placer y celebración interminable y comenzarás a comprender el énfasis en achal. Festeja la vida en el lugar dedicado al deleite.
He aquí la mejor parte. Edén fue colocado donde Dios permite el placer. Edén marca el lugar donde sea que Dios coloca a la criatura-terrenal en circunstancias que le permiten deleitarse en Sus dones. Achal es sobre consumo, no sobre comer comida. ¿Y qué es lo que podemos consumir con el deleite de Dios? Bien, comienza tu lista. ¿Qué tal consumir la belleza de los cielos matutinos, la maravilla de las canciones de un pájaro, el olor de la grama recién cortada, el frescor delicioso del arroyo en la montaña, el deleite en la sonrisa de un niño, la ternura exquisita de un beso, el gozo del compañerismo en la comunidad, el misterio de la presencia de Dios. ¿Creíste que el Edén era el paraíso perdido? Piénsalo de nuevo. Y ciertamente come de todo lo que Dios permite.
Comer, festejo, achal, placer, ´eden, Génesis 2:17